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¿Qué tan viable es la “descentralización” administrativa que propone amlo?

Por: Paulina Alba/Foto: animalpolitico.com

En estos últimos días hemos visto muy activo a Andrés Manuel López Obrador, quien, en calidad de Presidente electo ha dado a conocer algunas de las acciones que llevará a cabo, ahora que inicie el periodo de su gestión; una de ellas, es la “descentralización” administrativa que consiste en mover a diversas Secretarías de Estado hacia otras entidades federativas, sin embargo, antes de aplaudir o tildar de mala esta propuesta, ¿En qué consiste? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de que eso suceda?

Bien, de dicha propuesta, sólo me enfocaré en señalar las Secretarías de Estado; según AMLO, las mismas quedarían distribuidas de la siguiente forma: Turismo a Chetumal, Quintana Roo, SEMARNAT a Mérida, Yucatán; SENER a Villahermosa, Tabasco; SEDESOL a Oaxaca, Oaxaca; SEP a Puebla, Puebla; CULTURA a Tlaxcala, Tlaxcala; SSEA a Chilpancingo Guerrero; SAGARPA a Guadalajara, Jalisco; SFP a Querétaro, Querétaro; STPS a León, Guanajuato; SEDATU a Pachuca, Hidalgo; SCT a San Luis Potosí, San Luis Potosí; SE a Monterrey, Nuevo León.

En razón de lo anterior, según el Presidente electo,  las posibles ventajas de trasladar las Secretarías de Estado a otras entidades federativas, se traducirá en un incremento del crecimiento económico de aquellos lugares en donde se instalarán esos órganos administrativos; a su vez, esta “descentralización” permitirá que las Secretarías de manera estratégica estén más cercanas a aquellas regiones que en mayor medida demandan su atención.

Contrario a ello, la propuesta lejos de verse estudiada y fundamentada, en razón de todas sus implicaciones; hay que recordar que esos órganos forman parte de la Administración Pública Federal y una de las justificaciones de que dichos órganos se encuentren en la Ciudad de México atiende a un tema de interacción y coordinación eficiente entre ellos, entre el Presidente de la República, los poderes federales y desde luego los niveles de gobierno (Federal, Estatal y Municipal) y dada la compleja administración de nuestro país, se instauraron las delegaciones federales en cada una de las entidades federativas; ya que, los problemas, por ejemplo, en temas de desarrollo social, son diversos entre los Estados. Además de ello, no hay que dejar de lado que el desplazar los recursos materiales y a los servidores públicos que trabajan en dichos órganos administrativos resulta ser por demás oneroso; aunado a que, la interacción entre órganos puede tornarse ineficiente y onerosa, totalmente contrario al plan de austeridad que AMLO ha manifestado.

Desde mi punto de vista, la “descentralización” propuesta por AMLO no se traduce en una respuesta al complejo funcionamiento de la administración pública federal; al contrario, de llevarse a cabo, podría volverse aún más “pesada”. Los grandes retos que tiene la Administración Pública en sus tres niveles de gobierno, tienen que ver con temas de mejora regulatoria, hacer más ágiles y menos onerosos los procedimientos administrativos, el combate a la corrupción y la implementación del gobierno abierto, en donde la ciudadanía encuentre espacios para ejercer voz y que ésta pueda incidir en la toma de decisiones, entre otras cuestiones.