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Ser Mujer

Por: Marisol Kuri / Proyectos Integrales de Impacto Social

Ser mujer es confiar siempre en las posibilidades de lo humano y concebir de nuevo al mundo.

Quienes vimos a Emma Watson en ONU-Mujeres abriendo el programa “He for she”, entendímos con claridad el mensaje que impactó al mundo: “Si no soy yo ¿Entonces quién? Si no es ahora ¿Entonces cuándo?” agradeciendo la oportunidad de reimaginarnos.

Marzo honra la integración en lo cotidiano de una pequeña palabra que lo trasciende todo: libertad, palabra que abre un horizonte y recupera un presente; el nuestro, además de que nos identifica en igualdad de oportunidades y de resultados.

No pedimos más, pedimos igual.

Sumémos a lo anterior lo dicho por Adam Przeworski:

“La democracia es una forma de gobernar. Aún en una democracia directa, las decisiones de una mayoría obligan a todos, incluso a la minoría que se opone a ellas por cuestión de opinión o interés”.

Entonces el 51% de la población y una acción afirmativa ubica la realidad de las mujeres en materia de participación política y entendemos que la libertad no es una palabra más, sino la motivación para consolidar nuestros derechos.

Sabemos que no es lo mismo que exista en la norma un bien jurídico para que se refleje en la realidad pues hasta 1953, año en el que se otorgan en plenitud los derechos a la mujer mexicana para 65 años después hablar de paridad por bloques y de violencia política de género.

Si es en lo cotidiano donde se educan los ciudadanos para conformar un tejido social que nos une y afecta a todos, entonces desde lo cotidiano podemos reflexionar conjuntamente en que más allá de la paridad en la política, la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres debe alcanzar al conjunto de la sociedad, en los ámbitos económico, social y cultural.

Este mes analisamos nuestro avance, logramos iniciar el camino de retos fundamentales que nos resta caminar, y nos queda claro que la libertad es un derecho que se trabaja y se conquista para que cada quien obtengamos de mejor manera lo que nos corresponde.

Permítanme entonces reformular la propuesta: Si no somos nosotros ¿Entonces quiénes? Si no es ahora ¿Entonces cuándo?.

Soy mujer, libre de elegir y aún no muero en el intento de vivir mi vida.