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Dos nuevos valores en la plástica inauguran la exposición Punto Cero
El arte sigue siendo uno de los mejores recursos para sondear aquellos otros mundos, que existen en nuestro interior
Por: Christian Velázquez
QUERÉTARO, QRO.- Nicole Villaseñor y Gabriel Anzaldua, son dos nuevos valores que han descubierto en la plástica su forma de expresión, es decir, el modo en que después de hurgar dentro de las respectivas zonas que componen su mundo interior, lo exteriorizan a través del arte, utilizado éste, como el lenguaje idóneo para describir precisamente ese mundo en constante ebullición.
Nicole Villaseñor, artista joven que ha encontrado en el arte abstracto su propio lenguaje, inspirada por la naturaleza que en combinación con los sentimientos y emociones que en ese momento en que la obra se encuentra en construcción, están presentes de antemano, o bien, van surgiendo paralelamente, quedan plasmados a manera de pequeñas dosis de su propio éter en el lienzo, mismas que van constituyendo las partes de un todo; el acrílico sobre tela es su técnica.
“Quiero que mis cuadros lleven a las personas que los observan, a interpretar algo mucho más profundo de su ser, y que al contemplar la obra, puedan sentir emociones que tal vez no sabían que estaban ahí, o que de alguna manera por diferentes causas se encontraban bloqueadas; me gusta que mis cuadros evoquen esas emociones fuertes”, expresó la artista.
“La pintura para mí, en este periodo de mi vida en que ha habido mucho cambio, mucha evolución, ha sido una herramienta muy grande para descubrirme, para sacar esas capas que tal vez me cuestan trabajo descubrirlas y enunciarlas en palabras; en este sentido, el contacto directo con la tela, con los colores, con el gran formato, me sirve como catalizador para que salga todo lo que quiero decir”, resaltó, Nicole Villaseñor.
Por su parte, Gabriel Morales, otro joven artista y que forma parte de esta exposición dual, es diseñador gráfico, profesión que viene a acentuar su amor por el arte, y la técnica que ha desarrollado es “la línea continua”, la cual se basa en que una vez que se comienza el trazo que llevará a darle forma a la obra, no se debe interrumpir soltándolo, sino que la línea tiene que viajar a través de un “continuum” hasta llegar a la consumación de la imagen.
Gabriel Morales o Gabriel Alzaldua, recurre al apellido de su abuelo, Alfredo Alzaldua, como su nombre artístico, esto, a manera de darle un especial sitio, ya que es precisamente de él de quien recibiera la inspiración y los primeros contactos con la pintura como otra parte, como otro recurso para expresar lo que le rodea; sus emociones, experiencias, pensamientos, ingredientes que una vez vertidos en su parte interior, son preparados para ser proyectados a través del lenguaje del arte.
“La mayoría de mis obras, monocromáticas, se encuentran constituidas por rostros o cuerpos humanos, ya que considero que el cuerpo humano es muy expresivo y en este sentido, abren un abanico de posibilidades interpretativas para quien las observa”.
El título de la
exposición alude a que todo lo que existe, todo
lo que hay, parte de un punto. Un punto que se expande para crear un todo.
Un punto que puede ser percibido como el nacimiento de una
idea, de una semilla que dará fruto a algo increíble.
La vida misma se origina de un punto y la vida en si es un
punto diferente para cada quien. Es cuando abrimos los ojos que empezamos a
vivir. Es cuando nos damos cuenta de nuestro poder de crear, de plantar y
cosechar sueños y deseos; es el referente original, sin pasado ni presente en
que empieza la vida como tal.
La exposición Punto Cero se encuentra en las instalaciones de Boonker, ubicado en 16 de septiembre N0. 56 A. Centro Histórico de Querétaro, y tendrá una permanencia hasta el mes de julio.
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