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Fiestas de El Pueblito se convierten en patrimonio

Por: Christian Velázquez / Foto: Asomarte

QUERÉTARO, QRO.- Los Pueblos se definen por sus costumbres y tradiciones que le dan identidad y valor cultural a nuestras raíces, que nos identifican y nos hacen únicos.

En este sentido, las fiestas tradicionales de febrero de El Pueblito, fueron declaradas por el gobernador, Francisco Domínguez Servién como Patrimonio Cultural Inmaterial del estado de Querétaro por su valiosa aportación cultural en el folklore, costumbres, rituales ancestrales, danzas y manifestaciones religiosas, de esta manera fue publicado este viernes 6 de noviembre en la Sombra de Arteaga.

Es de resaltar que dichas celebraciones encuentran su origen en los inicios del proceso de evangelización en Querétaro; por lo tanto, se constituyen como un fundamental aporte a la historia y cultura de este lugar y de la entidad en general, por tal motivo, se hizo llegar a la secretaría de Cultura del Poder Ejecutivo del estado el expediente para promover esta declaratoria, al ser la celebración de mayor antigüedad en el municipio y que gira entorno a la veneración de la imagen de Santa María de El Pueblito.

Por otro lado, en la declaratoria destacan que es una de las expresiones que son reconocidas por la comunidad, donde intervienen y colaboran año con año en su realización, lo que funge como un coadyuvante en el fortalecimiento social y que es transmitida de generación en generación, lo que infunde un alto sentimiento de identidad y arraigo.

Con este proceso, el gobierno del estado ordenó a la secretaría de Cultura del estado para colaborar en la difusión y promoción de las actividades encaminadas a preservar, promover y difundir la cultura, conforme a la disponibilidad del presupuesto.

LA FIESTA MAYOR

Como parte de estas celebraciones se encuentran la Bendición el tradicional Paseo del Buey en Corregidora el primer domingo, el ofrecimiento del Caldo por la mayordomía, la bendición de la “Parande y la Colación”, la Batalla y Muerte del Moro y del Soldado. Respectivamente, además de hermosos bailables que nos regalan tanto la Corporación de las Inditas como los Niños de las Danzas de las Promesas.

Esta celebración se remonta a los primeros años del inicio de la evangelización cerca de 1531, sin embargo fue fray Sebastián Gallegos en 1632 cuando la escultura de una pequeña imagen con la advocación de María y fray Nicolás de Zamora colocaron en el sitio prehispánico para atraer a los indígenas a la evangelización.

En estas celebraciones se esperan la llegada de más de 20 mil personas que asisten año con año y una derrama de más de 10 millones de pesos.